ANGASMARCA

ANGASMARCA
Conoce el maravilloso pueblo de Angasmarca

VILLA AZUL

VILLA AZUL
Conoce un lugar Maravilloso

CRONICA FIESTERA (PARTE I)

sábado, 12 de septiembre de 2009


NOTA: Este post y el siguiente lo dedico al ex de mi ex, quién siempre copia mis relatos, los imprime y va donde ella a reclamarle mi forma de ser, de todos modos igual van mis saludos cordiales.



No lo dudé ni un segundo, sabía que debería estar en la versión dos mil nueve de la fiesta patronal (en honor a Santa Rosa de Lima) de mi pueblo: Angasmarca…

El día veintiocho estuve en clase y pensaba, en mis amigos en todo mundo… pucha dije Lorena irá, mi mejor amiga iba estar allá, y por otro lado Carlitos… - claro no puedo dejar de mencionar a Delfina- cómo no, si justo esos días empezamos a comunicarnos telefónicamente y por internet de una manera vista solo hace años (al menos cuatro años atrás) cuando ella aun salía conmigo, cuando nuestro amor empezó a menguar…

-“vente”- me dijo

E hice uso de esa clásica táctica de los hombres promedio peruanos (botarme):

-“no lo sé quizá vaya, pucha y si voy tal vez no te p

ueda ver ¿te dejarán salir?”-

-ven si puedes normal no?- Pecadora pensé.

Mientras el alba del día veintinueve iba haciéndose realidad, yo sufría para conciliar el sueño, además alguien me llamó al celular y me puso al auricular la bulla, las bandas de músicos, pucha estuve esperando tanto que ni dormí bien… adrede barajaba la idea loca de tomar el primer bus y viajar a Angasmarca a la fiesta patronal (aunque iba llegar un poco tarde) así lo hice, en ese momento me di cuenta que es cierto eso de que la espera desespera,

Cogí lo que encontré de ropa y me aventuré, volé a la agencia tomé uno de los pocos pasajes que quedaban y me sentí mas tranquilo, viajé mil horas y no había cuando llegar. Richard que viajaba a mi lado sufría por lo mismo:

-ya no vamos a llegar ni pa’ pasear las vacas

… -

-no jodas Juan, igual estamos viajando pa’ divertirnos o no?- Me decía.

Después de ver tres aburridas películas de Jean Claude Van Dame, de hacer una eterna parada en Santiago de Chuco y de escuchar como cincuenta canciones en el mp3, al fin llegamos y ansiosos mirábamos por la ventana lo que pasaba por las calles del pueblo y de repente como que no fue la impresión que imaginamos, pero que importaba si estábamos yendo para divertirnos y nada ni nadie iba a frenarnos, el bus entró por la calle donde vive Delfina, pucha la vi fugaz en una esquina, me emocioné otra vez y entonces comprendí que esa fiesta iba estar súper (aunque cuando terminó, escuché decir a la mayoría que estuvo malísima).


Una camisa color celeste (rayada) con mangas largas, un pantalón dril azul, y una pequeña rociada de colonia, estaban de mi parte para salir a divertirme como un loco, como no lo había hecho desde el año dos mil cinco (en que fue la última vez que celebré una fiesta similar)…

Por ahí los Lihón (lo que queda de mi familia Lihón) nos hicieron llevar ese palo pintoresco donde penden las patas y rabo del vacuno que horas antes habían donado (previo paseo); había ido para divertirme, pensaba para mí mismo y saltaba como nunca y escuchaba cohetes por doquier, risas gritos y quizá llantos… todo se hacía en un solo ambiente y de repente no fui feliz pero mi algarabía llegó a contagiar y por ahí cuando llegamos (casi ahogados) a la casa de la mayordomía alguien nos dijo (de buena manera): “sobrinos son la cagada…”. Mientras (a falta de vasos) tomábamos a pico ‘e botella de una cerveza que aquel veintinueve de agosto a las cinco de la tarde sabía dulce casi azucarada, sabía riquísima… incluso refrescaba como agua pura, jum todo se veía prometedor y de reojo por ahí vi a Shalito (estaba como uno quería) y al parecer, esa noche aguardaba llena de sorpresas. Se vendría una supernoche y un baile casi pagano…

Un sol refulgente inundaba con su brillantez y yo con retazos de papel higiénico me secaba el sudor, mientras conversaba con familiares que había vuelto a ver después de siglos… todo Angasmarca y mejor aún las personas que quería estaban por ahí bailando en ruedas, en grupitos y para variar a mí se me subieron los humos, esos humos que equivalen a ánimos machistas que el hombre promedio peruano posee… además no era para menos, por ahí andaba Delfina, Shalito, y para rematar, la flaca la hermana de Lourdes… ufff era como estar en medio de un concierto, donde yo era el cantante… era un chongazo me decía Carlitos.

Mientras hacía malabares para escapar de los Lihón, la relojeaba a la Delfina, que andaba con la gente de mi barrio será que esa cerveza me había emocionado? Igual estaba cambiadita que llamaba la atención mi ex amorcito, ese amorcito prohibido que fue cuando andábamos en secundaria, se había aplicado un brillo a los labios que en “one” me hizo decirle algo tan huachafo, tan fuera de cuadro como:

-pucha esos labios tan pa’ comerlos…-

-tu jamás vas a cambiar, te pasas- me asustó, pero luego me soltó una sonrisa

-ok ok disculpa olvidé que eres una señora, perdóname-

-ya oyeee además no estoy casada- me dio cancha.

-bailas?- le pedí y tan linda ella, al toque asintió.

Una vez bailando, cortésmente le invité una cervecita, pero nada, por el contrario me dijo que no tomaba

-no tomas poco-

-tú como siempre jodido, que especial eres Juan Carlos-

-nada además es pa’ la sed-

-se nota que tú tas deshidratado ‘tonces-

-yayayay no me vaciles, mira que he venido desde tan lejos por ti-

-jajajaja no te digo, tú sigues igualito, jajajaja que crees que no me doy cuenta que hace rato ‘tas que le haces ojitos a la Shalito-

-no pasa nada Delfinita, tú siempre has sido y serás el amor de mi vida-

-sabes qué, mejor baila- y en lugar de ponerse seria se reía de mi manera de bailar.

-tú como siempre choteándome-

-ya ya ya payaso baila nomas-

Claro me estaba esquivando pero con cierta coquetería como quien no quiere la cosa y eso a mí me emocionaba, es como jugar con fuego, es como cuando lo prohibido se vuelve más prohibido todavía... Con apenas una hora y media en Angasmarca, me estaba divirtiendo con todas las ganas porque se supone que para eso viajé (pensaba en la célebre frase de Richard) bailé con Delfina como tres piezas (todas huayno) y en esas conver

saciones y sonrisas, sembré mi discurso, mis huachaferías, mis mentiras… y ella por momentos parecía creer y me decía cosas como: -ya vacan en la noche ‘tonces, pero no seas falla- ¿Estábamos coqueteando o me parecía? Que importaba porque igual todo estaba de onda (y para sorpresa mía) sentí que aún era el propietario de al menos una ínfima parte de su cariño pero preferí ser cauto y hacer como si nada, como si no me estuviera dando cuenta de que ella aun manejaba esas situaciones de galantería y coqueteo, ella risitas yo florero…

Yo sabía que tenía que ir donde Shalito y bailar, conversar, madrugar a cualquier galán potencial que estuviera al acecho (incluido Carlitos), y así lo hice, le dije que estaba guapa, que durante los años en que no nos habíamos visto se había puesto como lo repito guapísima… ya no exageres amiguito, me decía… en la noche somos ehhh, ya vacan me decía,

mientras hablábamos, pensaba que la competencia había comenzado, quizá ahora bailaba con ella pero Carlos no se iba cruzar de brazos, mucho menos un mocoso de quince años que parecía su sombra pero que a la larga no ataba ni desataba sin embargo mi mejor amigo era mi rival ufff esto estaba de candela pensé, mientras le daba una vueltita y la traía hacia mí con la mano sobre esa sutil cadera y algo agitada me decía: huuy se nota que tas con ganas de bailar y yo monótono aplicaba la frase de Richard: claro además he venido para divertirme… “tengo siete días, para enamorarte” decía la canción que bailamos…

-pensando, guarda maquina pa’ la noche, parece que va haber acción- me decía Carlitos.

-nada un par de chelitas nomas, de hecho en la noche la hacemos hija-

Pero claro siempre viene la desunión:

-ta buena la Shalito no Juan?-

-si ‘ta en algodón-

-yayaya seee tas que le hechas el ojo huevón-

-déjame ser pes o te picas?-

-vamos compare vamos a cenar, no quiero que por culpa de ella se termine nuestra amistad-

-mierdaaa jajajaj ya me hiciste reir jajajaj –

-no pasa nada jamás pelearíamos por una flaca ssss vamos nomas –

Fue como si hubiera llovido sobre mojado, Carlos es mi amigo es mi mejor amigo pero jamás de los jamases entraría en broncas por una flaca, él también lo sabe, pero esta vez como que algo no me cuadró, fue como quedarme con un sinsabor, tal vez fueron las cervezas no lo sé.

Camino a la plaza, nos chocamos con un centenar de personas, casi todos, amigos nuestros y quizá por ahí algún enemigo sin embargo luego de chocarnos con gente conocida y extraña, vimos que por ahí venía Anita (la gatita) su gatita de Carlitos, pensar que vino desde Trujillo (en medio de un teatro armado por Carlos y su prima Edith) para supuestamente pasarla de pelos en Angasmarca, no obstante que a estas alturas se merece un premio por el montaje y mejor actriz (se hizo pasar por sobrina de la tía de Carlos incluso se quedó a dormir donde la casa de los abuelos del gran Carlitos, todo un golazo fue el hecho de que ella viaje a Angasmarca atrás del sucinto Carlitos… no había dudas que Carlos era de las grandes ligas)

-ayuda Juan , está molesta me ha visto con la Yesi-

-yaya normal-

Vaya que andaba molesta, pues traía una cara, severa algo tiesa por no decir de pocos amigos y tuve que hacer algo porque si no estábamos perdidos:

-ehhh holaaa Anita-

Y me lanzó un hola glacial:

-hola-

Y Carlos:

-hola-

-ahh hola ni me fije que estabas aquí- miércoles esta asada pensé

-Juan está molesta conmigo no sé por que –

-que si Anita?-

-él sabe muy bien y que no se haga el sonso-

-hey tranquila-

-sabias que es muy amiguero tu primo –

-no nada di Juan?-

Y yo como siempre sobón:

-no nada somos tranquilos-

-huy si por donde ah? Ni dormidos son tranquilos-

-por qué lo dirás- coqueteé

-como hacemos en la noche Anita- dijo Carlitos

-mira chiquito yo ya tengo planes-

-hey tas agresiva –

-mira Juancito no tengo ánimos para pelear ok?-

Menos mal que por ahí había una banda de músicos y le pedí un bailecito como para sofocar el incendio que se estaba propagando entre Carlitos y la gatita.

-¿bailas Anita?-

-ya fácil-

Carlos estaba en bajón, sus infidencias lo estaban hundiendo, en cambio yo que estaba resurgiendo de una ruptura de hace meses, me sentía chévere, de lo mejor, o sea solo sin que te llamen sin que te marquen, era como volver a los viejos tiempos y que mejor oportunidad que la fiesta para salir acechar a las potenciales carnadas… esa chiquita bailaba con locura, en realidad a veces me dejaba chico (no es que sea un gran bailarín pero siempre hago el mejor esfuerzo) a legua se notaba que no era una gatita si no por el contrario era una gata…

Acabada la música y al mismo tiempo que le guiñaba el ojo a Carlos nos dijo:

-bueno chicos los dejo y que se diviertan- y se fue toda cachacienta, mostrando esa pequeña voluptuosidad que la naturaleza le había conferido y nosotros mudos, Carlos sobretodo…

-déjala ya le va pasar compare, así son las chibolas – intentaba barajar el roche.

-si ya fue vámonos-

¿Acaso esas niñas podrían hacer que nuestros ánimos aterrizaran?, para nada puesto que nosotros a medida que avanzábamos hacia la plaza pensando en la noche que prometía (para ambos) planeábamos -tan previsores como siempre-, jugándonos bromas jodiéndonos como cuando éramos adolescentes, quizá felices rememorando esas etapas del cole y de nuestras aventuras que ahora han quedado lejanas. Esa noche la íbamos a pasar de pelos ambos lo sentíamos y la química fraternal entre nosotros, fluía y desde luego era una muestra de la complicidad que venimos viviendo desde hace aproximadamente nueve años… como diría Jaime Bayly:

-y de repente un ángel-

Digo de repente porque fue así de casual o de casuela como a veces digo vulgarmente, era la Lorena, mi querida Lorena y para variar nos volvimos a encontrar en una fiesta (como hace años atrás en el dos mil cinco cuando nos conocimos) justo un día veintinueve como ahora la conocí en el baile, yo alucinado y ella toda ojazos hacia mí, (líneas más abajo encontraran algunas referencias históricas) desde luego lleno de cortesía la saludé, mejor dicho nos saludamos, el respectivo besito y el pequeño abrazo y la plática espontánea:

-hooola Lorenaa que tal como estás-

-hola Juan Carlos ¡que sopresa!-

-jeee ves vine – y en mi mente planeaba repetir esta huachafería: “vine por ti”

-sí que chévere-

-¿y qué tal? –

-bien Juan Carlos, todo bien-

-si pues ‘tonces pucha ahora si tendremos que divertirnos verdad- le dije lleno de picardía

-de hecho-

-pucha que roche esta tu familia por ahí,no se pondrán celosos?-

-no para nada además te conocen-

-asiii? Luego me cuentas eso ehh-

-a ya normal-

-ok, tonces nos vemos más tarde no te vayas a guardar-

-no para nada-

-ha sido un gustazo volver a verte-

-igual Juan Carlos, nos vemos-

Y siguió su andar apurado, luego de encontrarse conmigo así intempestivamente después de saludarme y que toda su familia nos haya visto tan amenos se pasó por mi lado derecho, no sé si adivinando un millón de interrogante pero de lo que si pude estar seguro es que ella en ese momento pensaba en mí (claro como amigos) y quizá al igual que yo también sentía que esa noche iba ser grandiosa.

Antes de poner el mensaje de continuará quiero incluir las referencias históricas de lo que en el año dos mil cinco fue mi frustrado amorío con Lorena, son párrafos de una saga de cartas que en aquellos años me atreví a escribir y los cuales hoy al abrirlos, en un esfuerzo muy pocas veces visto en mi persona mr han hecho ver que los años me han cambiado en ciertos aspectos, ya que todo ha sido como abrir el baúl de los recuerdos y al hacerlo me he quedado pensativo en estos dos párrafos los cuales pertenecen a dos cartas diferentes, cada uno está con su respectiva fecha (sugerencia: no se burlen) si ya lo sé en ese tiempo mis huachaferías eran más exageradas que ahora, de todos modos me di el tiempo de copiarlos luego de leer a grosso modo esas sufridad cartas de un adolescente que se alucinaba escritor y que sufría por la chica de sus sueños la que al mismo tiempo no estaba a su alcance, será por eso que lineas arriba puse la palabra "frustrado amorío"...:

[…si ambos ya no podemos llevar esta cruz por separado es algo que debemos compartir simplemente debemos querernos sin miedos ni incertidumbres…

Trujillo, sábado 10 de setiembre de 2005]

[Y medio aniñado le contare a mi papá: “… y cuando se iba ir le escribí una carta y le tomé una foto…y nos miramos, ella en la ventana con la expresión a medio vivir y yo con mi cafarena celestita me quedé parado…sazonando el dolor de una despedida…” y él lleno de picardías, las que a la vez me alegran me dice: “compra tu pasaje hasta Lima pues...” y después de un rato ambos reímos…

Trujillo, 20 de Octubre de 2005]

Esta historia continuará…